Unidad especializada en miopía en niños
En Clínica Villoria, oftalmólogos en Vigo y Pontevedra, disponemos de un equipo de profesionales expertos en el tratamiento para frenar el avance de la miopía en niños y jóvenes.
Frenar el crecimiento del ojo = Frenar miopía
El ojo miope crece excesivamente en longitud. Para frenar la miopía es necesario frenar su crecimiento, para que la miopía aumente lo menos posible y lo haga a menor ritmo, para que el resultado final sea una baja miopía.
No basta con graduar la vista
El control de la miopía no consiste sólo en controlar las dioptrías. Exige realizar un completo estudio con múltiples pruebas: estudio del fondo de ojo tras dilatar de la pupila, topografías corneales y pruebas biométricas especiales para controlar que el ojo no crezca en longitud más de 0.18 mm y 0.5 dioptrías por año.
Opciones de tratamiento
El ojo miope crece en exceso en longitud, es más alargado de lo normal. Esto hace que la visión lejana sea borrosa al enfocar la imagen por delante de la retina. Al seguir creciendo aumentan las dioptrías de graduación (miopía refractiva) pero al mismo tiempo acontecen alteraciones anatómicas por la elongación del ojo, la retina se hace más vulnerable, etc., que predisponen a sufrir futuras complicaciones con riesgo de pérdida de visión.
La miopía habitualmente se desarrolla entre los 6 y los 18 años. Durante este período es aconsejable el control y tratamiento de la miopía en niños y jóvenes por un oftalmólogo experto y tratar a aquellos niños en los que su miopía progresa a mayor ritmo. Para conseguir el mejor resultado hay que empezar cuanto antes, ya que la miopía crece más durante los primeros años. El tratamiento no elimina las dioptrías, frena la progresión de la miopía.
Si aumentan las dioptrías, no basta graduarle y cambiarle de gafas. Lleva a tu hijo a un médico experto en control de miopía. Es necesario realizar un control médico y pruebas biométricas especiales para controlar el ritmo de progresión del crecimiento del ojo y de su miopía. Sólo así podemos aplicar el tratamiento idóneo en cada momento
Disponemos de lentes de contacto especiales (Orto-K ) de uso exclusivo mientras se duerme. Permiten ver bien durante el día sin necesidad de gafas o lentillas y además frenan la miopía.
A partir de los 6 años, incluso antes, casi todos los niños pueden llevar lentillas si están motivados tanto los padres como los niños. Sólo se requiere que adquieran los hábitos de higiene y la destreza manual necesarios para la manipulación de las lentillas. Por supuesto, bajo la supervisión de los padres y control médico.